Entrevista a Néstor Altuve, Consultor de Red PNA
“La consultoría es un negocio de conversación y acompañamiento”
Es como define Néstor Altuve su trabajo como asesor de empresas en Transformación Digital.
No se trata solo de vender una herramienta o solución, son muchas horas de escucha, varias
sesiones de “tomémonos un café”, y numerosas reuniones con varios miembros del equipo
hasta tener una visión clara de las necesidades de la empresa.
Al preguntarle sobre los escenarios más comunes que se suele encontrar en estas primeras
reuniones, nos comenta que son diversos, pero que tienen un punto en común: la
desinformación.
- Directiva con información incompleta por parte de las diferentes áreas
- Visión errónea de lo que es Transformación Digital: no se trata solo de tener un sitio web o de haber invertido en Google y FB
- Frustración
- Digitalización incompleta
- Poca alineación entre áreas
- Visión poco estratégica
Lleguemos a un consenso: ¿Qué es Transformación Digital?
Y es que “Transformación Digital” es un término muy usado, pero que no siempre se entiende
de la manera correcta. Hay quienes piensan que se trata de tener una página web o de tener
presencia de marca en Google y redes sociales. Otros se aventuran más y hacen grandes
inversiones comprando softwares de gestión que luego no generan los resultados esperados.
Así es el caso que Altuve denomina “La frustración del CRM”, al referirse al boom de las
soluciones de ventas que afectó a los equipos comerciales hace 20 años y que no aumentó las
cifras como se esperaba. ¿La razón? La herramienta sola no haría magia, se necesitaba
también un cambio de mindset.
Entonces, para hablar propiamente de Transformación Digital debemos cumplir dos objetivos:
Eficiencia y Valor.
Si unimos ambas dimensiones, es muy probable que lleguemos a una redefinición del negocio,
un cambio en la cadena de valor con el objetivo de mejorar nuestra oferta al cliente o
consumidor.
Está claro, lo incluyo en mi plan estratégico
¡No!, otro gran error de concepto. En este sentido, Altuve nos comenta que uno de los
principales errores es ubicar a la Transformación Digital dentro del plan estratégico de una
empresa como un elemento más.
Señala que en realidad se trata de un proceso estratégico integral que abarca desde lo humano y, por supuesto, hasta la visión del negocio y su impacto en el cliente.
Las empresas son personas
Otro de los puntos clave en el proceso de Transformación Digital.
Y es que no se trata solo de la compra o implementación de nueva tecnología. En este sentido,
Altuve, comenta que la cultura empresarial es crucial para llevar estos cambios a buen puerto.
Si bien podríamos pensar que se trata de un tema 100% tecnológico, se trata en realidad de un
cambio humano. De esta manera, Altuve ha creado metodologías que incluyen la Inteligencia
Emocional en la ecuación, para garantizar una integración correcta entre las personas, los
equipos y las nuevas herramientas.
La TD no es algo de “un grupo” o solo del área de TI, debe involucrar a la compañía en su
totalidad, por eso el acompañamiento. Por eso, Altuve recomienda que la consultoría en esta
área debe ir más allá e incluir educación.
A tomar en cuenta
Ya tenemos claro qué es lo que tenemos que hacer. La Transformación Digital no es una
moda, es más que una actualización: es el cambio por el que deben pasar las empresas en la
era digital si quieren mantenerse vigentes para ofrecer productos o servicios de valor para sus
clientes. Todo esto, apalancado en la eficiencia y apoyado en herramientas digitales pensadas
e implementadas estratégicamente.
Ahora le preguntamos a Néstor Altuve por los Don’ts, pues hay que estar preparado para todo,
y esto es lo que nos contestó:
- No negarse a la Transformación Digital
- No pensar que no es un proceso complejo
- No es algo que solo atañe a TI o a un grupo pequeño de la empresa
- No dejes de lado el proceso humano
- Y para cerrar agregó un sí: trabaja con una hoja de ruta que comience desde Recursos
Humanos